La barrera psicológica del condón

Supongo que comprenderás que, dado mi estilo de vida, sea muy pro-condón. Pero no siempre me topo con gente de la misma opinión, y cuando esa gente coincide con la que pretende meterse entre mis piernas, ¡Houston, tenemos un problema!

No hace falta que te explique -y si es así, vamos mal-, la importancia de usar condón cuando no se tiene una pareja estable. Tú sabes con quién te acuestas, pero no sabes con quién se acuestan los demás, y ante las relaciones esporádicas siempre hay que tener presente la máxima 'no te acuestas con una sola persona, sino con todas con las que se ha acostado antes'.

Soy Gwen y tengo una cuenta en Badoo...

¡Hola Gwen! Bienvenida al grupo...

Así, como si se tratara de un grupo de adictos, o de apoyo, me confieso, con banda sobre los ojos incluida -porque reconzcámoslo, si andas en algunas redes y lo admites una debe conservar su relativo anonimato-, me uno al inexistente grupo de Badooistas anónimos.

¿Qué eso no existe? ¡Qué coño, lo fundo ahora mismo! Porque también tenemos derechos, tenemos nuestro corazoncito, nuestros ojos sangrantes y nuestro orgullo herido. Sí, tengo un perfil en Badoo, ¿y qué? (clama al cielo como una lunática agitando el puño).

Putas feministas

¡Ups! Si has venido aquí a saltarme los ojos o a aplaudirme por meterme con el feminismo - según cada cual- me temo que te va a defraudar lo que leerás.

Sí, sé que puede ser un título sensacionalista, pero si los periódicos de renombre pueden hacer uso de ellos, ¿por qué yo no? Al fin y al cabo ha funcionado -aunque no vayas a encontrar lo que esperabas-, porque estás aquí, leyéndolo, ¿no?

Antes de empezar, apaga las antorchas, toma aire y abre la mente. ¿Ya? ¿Mejor? Bien, comencemos, que tenemos mucho de lo que hablar...

And the winner is... #PrimerAniversario

Hoy, aún con la resaca mental del primer aniversario del blog, es hora de anunciar quién se llevará a casa el lote de productos eróticos.

Pero antes de desvelar el misterio....